Homenajeando a Kvplos

La foto de mi homenajeado: Kvplos

Mi foto

Cuando vi que me había tocado Kvplos como homenajeado ni siquiera tuve que ir a su galería para elegir foto, supe al momento que foto iba a hacer. La había visto durante el curso de l’Atelier y me gustó muchísimo. Así que la foto estaba clara pero la ejecución ya no lo estaba tanto: necesitaba un modelo que accediera a un “robado pactado”, una hora del día concreta, el atardecer casi la noche y un lugar concreto.

El modelo, mi hermano, es una persona muy ocupada así que me costó encontrar un día en el que los dos coincidiéramos, la hora del día tenía que ser casi anocheciendo, eso no fue tan difícil pero el lugar no pude elegirlo: tenía que ser cerca de su casa porque estaba con sus niñas y no podíamos movernos a Bilbao, a la Gran Vía, que es lo que me hubiera gustado. Así que nos pusimos manos a la obra intentando hacer que aquello pareciera un robado. Ese día hacía bastante calor y yo llevé la bufanda y le obligué a ponersela, el pobre se moría de vergüenza con la bufanda y posando en plena calle. Y yo dale que te pego click, click, click. Mientras tanto sus niñas se reían de el las muy malvadas y la gente lo miraba pensando que era algún personaje conocido.

La foto no quedó como me hubiera gustado, la cruz verde de la farmacia la odié, pero no hubo forma de que la apagaran. Me hubiese gustado repetirla pero ya no pudo ser, no me quedaban días, así que intenté mejorarla un poco con la edición intentando conseguir algo parecido a la foto de Kvplos y esto fue lo que quedó. Espero que a mi homenajeado le haya gustado.

Dos días después de hacer la foto, casualidades de la vida, me dí de bruces con este hombre leyendo el periódico. Y esto si que fue un robado en toda regla, el hombre ni se enteró.